miércoles, 7 de octubre de 2009

SIEMPRE SE PUEDE

Agradezco a todas y todos, las visitas y las palabras de amistad que me habéis dedicado en este tiempo en el que precisamente el protagonista ha sido mi ausencia.Ausencia motivada por la desgana, la falta de ánimo, la tristeza, la apatía...
Vuelvo con necesidad de retomar el sendero, de levantar mi mirada, de seguir caminando, y aunque las heridas, el quebranto aún a veces me estremecen, vengo a compartir este texto que ojalá me ayude a recuperar la fuerza, la serenidad y la paz que mi corazón tanto anhela...

SI ME VES..

Si me ves cansado, fuera del sendero, ya casi sin fuerzas para hacer camino,
si me ves sintiendo que la vida es dura, porque ya no puedo,porque ya no sigo...
Ven,
ven a recordarme cómo es un comienzo,
ven a desafiarme con tu desafío.
Muéveme el alma, vuélveme al impulso, llévame a mí mismo.
Yo sabré entonces encender mi lámpara en el tiempo oscuro,entre el viento frío.
Volveré a ser fuego desde brasas quietas
que alumbre y reviva mi andar peregrino.
Vuelve a susurrarme aquella consigna
del primer paso para un principio.
Muéstrame la garra que se necesita para levantarse desde lo caído.
Si me ves cansado fuera del sendero,
sin ver más espacios que el de los abismos,
trae a mi memoria que también hay puentes,
que también hay alas que no h emos visto.
Que vamos armados de fe y bravura, que seremos siempre lo que hemos creído.
Que somos guerreros de la vida plena
y todo nos guía hacia nuestro sitio.
Que un primer paso y que un nuevo empeño
nos lleva a la forma de no ser vencidos.
Que el árbol se dobla, se agita, se estremece, se deshoja y retoña
pero queda erguido.
Que el único trecho que da el adelante
es aquel que cubre nuestro pie extendido.
Si me ves cansado fuera del sendero, solitario y triste, quebrado y herido,
siéntate a mi lado, tómame las manos, entra por mis ojos hasta mi escondrijo
y dime: "se puede" e insiste : "se puede".
Hasta que yo entienda que puedo lo mismo
que tu voz despierte, desde tu certeza al que de cansancio se queda dormido.
Y tal vez, si quieres, préstame tus brazos para incorporarme,
nuevo y decidido.
Que la unión es triunfo
cuando hombro con hombro vamos.
¡Así se puede! Con el mismo brío.
Si me ves cansado, fuera del sendero
lleva mi mirada hacia tu camino.
Hazme ver las huellas que allá están marcadas
de un paso tras otro por donde has venido.
Y vendrá contigo una madrugada,
la voz insistente para un nuevo inicio.
que abrirá otro rumbo, porque si he creído, que siempre se puede...
es que se puede, mi querido amigo.